23 de agosto de 2021
Estimado paciente:
Para asegurarnos de que siga recibiendo una atención médica excelente y coherente, queremos informarle de una dinámica de derivación que se está produciendo en los hospitales locales y que podría amenazar la relación médico-paciente que hemos establecido.
En muchas ocasiones, cuando nuestros pacientes han acudido al hospital por problemas no necesariamente relacionados con su enfermedad vascular, el personal del hospital ha intentado remitirlos a un cirujano vascular empleado por el hospital. Creemos que esto se debe a que los hospitales obtienen beneficios cuando los pacientes acuden a médicos que son empleados del hospital, en lugar de los médicos independientes, como nosotros.
Por favor, le pedimos encarecidamente que tenga en cuenta que no tiene ninguna obligación de ver o cambiarse a este nuevo médico impuesto por el hospital. Usted tiene todo el derecho de decir que está bajo el cuidado de otro médico y no tiene ninguna intención de cambiar de médico. El hospital no tiene derecho a interferir en su elección como paciente.
Esta práctica de derivación no sólo ocurre en nuestros hospitales locales. En todo el país, los hospitales están desviando a los pacientes de los médicos independientes y dirigiéndolos a los médicos contratados en muchos casos para que los hospitales puedan ganar más dinero. Esta dinámica está perjudicando la continuidad de la atención y debilitando las relaciones médico-paciente de larga duración. Esta práctica también puede provocar un aumento de los costos médicos y la duplicación de visitas, pruebas y procedimientos innecesarios.
Acudir a un médico contratado por un hospital suele ser más costoso porque los hospitales facturan los servicios de sus médicos contratados a precios mucho más elevados y tienen que compensar mayores gastos generales. Además, añaden las tarifas de las instalaciones, que pueden aumentar el costo del tratamiento a veces entre tres y diez veces la tarifa de los médicos. Los hospitales también suelen exigir a sus médicos contratados que remitan a los pacientes únicamente a otros médicos contratados por el hospital, lo que también puede provocar un aumento de los costos y una violación de su derecho a elegir su propio proveedor.
Por lo tanto, cuando un médico empleado del hospital intente remitirle a otro médico empleado del hospital, recuerde: usted tiene derecho a permanecer con el médico con el que ha establecido la atención. Asegúrese de que su familia también lo sepa.
Nuestro objetivo es continuar con la relación y la atención que hemos establecido con nuestros pacientes a lo largo de los años, garantizando al mismo tiempo que los hospitales no aumenten innecesariamente los costes ni interfieran en la elección del paciente. Nos comprometemos a ofrecerle una atención de máxima calidad. No dude en ponerse en contacto con nosotros si tiene alguna pregunta en el 407-648-4323 o en el 352-241-7585.
Atentamente,
Dr. Charles Thompson, Dr. Jon Wesley, Dr. Adam Levitt, Dr. Michael Muehlberger, Dr. Richard Teed y Dr. Kevin Treto